Trastorno del Espectro Autista
“Este trastorno pone de patas arriba muchas de tus convicciones y te enseña otro modo de mirar el mundo y a los que forman parte de él” (1)
Por Ana Muiño Tato
Cada vez podemos encontrar más casos de Trastorno del Espectro Autista (referido como TEA a lo largo del texto), dónde los primeros signos de alarma detectados por los padres son: la falta de lenguaje, movimiento de objetos de forma rígida, rabietas desproporcionadas o poco o ningún contacto ocular.
¿El TEA tiene cura?
Es muy común especialmente en los casos de niños pequeños que existan las siguientes dudas por parte de los padres: ¿se le curará? ¿se le va a notar? ¿Tendrá un gran retraso respecto a sus iguales? ¿Hablará?
Es importante comenzar explicando que el TEA no tiene cura, sin embargo es una condición que no tiene que ir ligada con una falta de calidad de vida: lo que sí está demostrado es que si se trabaja de forma temprana con estos niños se pueden llegar a conseguir resultados muy positivos a largo plazo, consiguiendo el máximo de sus posibilidades. En manuales como el DSM-5 nos hablan de tres síntomas claros (APA, 2013):
Principales síntomas
- Dificultad tanto para la interacción como la comunicación social (falta de contacto visual, acercamiento, poco o ningún interés por mantener contacto con otros…)
- Intereses y actividades repetitivos y no funcionales. Básicamente nos encontramos con niños que “no saben jugar”, y realizan juegos como girar objetos, alinear juguetes, ciertos rituales… frecuentando rabietas desproporcionadas si no se les deja realizar estas manías. No nos podemos olvidar que los niños aprenden jugando a través de la imitación de su entorno (por ejemplo, mamás y papás, ser animales, etc). Estos niños, al tener otro tipo de intereses y dificultad en mantener la mirada, no presentarán este tipo de juegos lo que dificultará el manejo de solución de conflictos, representación de roles, ciertos movimientos de objetos y relaciones sociales.
- Podemos encontrarnos unos intereses “sensoriales”, por ejemplo, las luces o por objetos en movimiento. Sin embargo, también podemos encontrar el punto contrario, niños que sientan rechazo y tengan rabietas desproporcionadas al sentir ciertas texturas de alimentos, sonidos…
Niveles de gravedad
Como indica el propio nombre del trastorno, el TEA es un espectro dónde podemos encontrar diferentes niveles de gravedad (APA, 2013). Dependiendo del grado de afectación que tienen los criterios mencionados anteriormente, encontraremos 3 niveles. El nivel 3 es el de mayor dificultad, tanto en comportamientos restrictivos y repetitivos como en comunicación social requiriendo una ayuda muy notable; el nivel 1 requiere ayuda, ya que sin ella habría dificultad pero no de forma tan excesiva como el anterior (dentro de este nivel encontraríamos al autismo de alto funcionamiento).
Terapias
Por ello, las terapias realizadas a estos niños tienen que ser individualizadas, ya que no existen dos niños iguales a pesar de tener el mismo diagnóstico. Sin embargo, podemos encontrar ciertas características comunes como: intereses restringidos y repetitivos en el juego, teniendo intereses demasiado obsesivos con rituales que les proporcionan tranquilidad, dificultando de manera excesiva el juego funcional; dificultad en el lenguaje y la comunicación; cierta hipo/hipersensibilidad sensorial (Talero et al., 2003; León y Linares; 2017).
Cada vez hay más estudios que demuestran la eficacia de diferentes terapias en el autismo, por ejemplo, intervenciones con PECS, Método TEACCH, el Modelo DENVER o Metodología ABA (Applied Bahavior Analysis) (Mulas et al., 2010). Por ello, es importante continuar y seguir investigando sobre diferentes metodologías beneficiosas para poder intervenir de una forma precoz.
Recomendaciones
Para aquellos que quieran conocer más información, tienen esta página (“Autismo Diario”): Autismo Diario – Web Líder sobre noticias de autismo en español, dónde podrán resolver dudas más específicas sobre el autismo con actualizaciones sobre noticias de autismo.
En la página de Aetapi (profesionales del autismo). Podemos encontrar libros, cuentos, bibliografía de interés…
El siguiente artículo también refleja de forma clara y exhaustiva la explicación de este trastorno, sus posibles causas y manifestaciones: art5.pdf (binasss.sa.cr)
- (1) Frase del libro “El niño al que se le olvidó como mirar: comprender y afrontar el autismo”, de Martos y Llorente (2017) dónde se indaga de forma más profunda sobre el posible origen, evolución y tratamiento de estos niños a través de diferentes casos de niños y población juvenil.
Referencias
American Psychiatric Association. (2013). Diagnostic and statistical manual of mental disorders. (5. ed., Ed.)
Leon, C. M., & Linares, C. M. (2017). Percepción de de cuidadores y profesionales en psicología, frente al uso y efectividad de terapias basadas en el método ABA (Applied Behavior Analysis) para el tratamiento de personas con autismo. Análisis Aplicado de la Conducta y TEA.
Martos, J., & Llorente, M. (2017). El niño al que se le olvidó como mirar: Comprender y afrontar el autismo. La esfera de los libros.
Mulas, F., Ros – Cervera, G., Milá, M. G., Etchepareborda, M. C., Abad, L., & Téllez, M. (2010). Modelos de intervención en niños con autismo. Revista Neurológica, 50, 77-84.
Talero, C., Martínez, L. E., Mercado, M., Ovalle, J. P., Velásquez, A., & Zarruk, J. G. (2003). Autismo: estado del arte. Revista Ciencias de la Salud, 1(1), 68-85.
Ana Muiño Tato
Graduada en psicología y educación infantil. Máster en Atención Temprana
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