Paseo a solas
Por Gabriela Cigliuti
Pasear, caminar, pensar, observar, imaginar… evolucionar.
Pasear no es sólo caminar por placer. Es iniciar un camino en un punto de inicio y finalizarlo en otro. Es un traspaso, es una evolución, un breve viaje, es un camino. Al igual que nosotros nos desplazamos desde un punto a otro, también lo puede hacer nuestra mente. Es por eso que recomiendo el paseo a solas, para que ese proceso sea individual y único y sume en tu proceso de conocimiento interno.
Caminar no es sólo ir de un punto a otro. No sólo ponemos en funcionamiento a nuestras piernas, también movilizamos nuestra mente. Observamos las calles, sus gentes, sus dinámicas y con ello llegan nuevos inputs a nuestra mente. Esta nueva información debe ser almacenada creando nuevas conexiones neuronales y, por lo tanto, recolocando la información que ya teníamos presente en nuestras mentes. Movilizamos viejos pensamientos, nos los cuestionamos y, por lo tanto, evolucionamos.
Pensar no es solo tener la mente activa. Es también reflexionar, cuestionar, valorar, desechar, apreciar, proyectar, agradecer, lamentar, amar, detestar… y dejarnos volar.
Observar no es sólo abrir los ojos para ver bien el mundo exterior, es también observar nuestro mundo interior. Poner atención en cómo nos sentimos. Este paseo me está sentando bien, está siendo agradable, si sé dónde voy o, por el contrario, camino sin destino y cómo me hace sentir esto, si estoy cansada, si tengo energía para rato, si me apetece detenerme un rato o el cuerpo me pide seguir… Identificar sensaciones e identificar cómo nos sentimos bajo estas emociones. Esto nos ayudará a normalizar el ejercicio de ser conscientes de cómo nos sentimos y no ir en automático, una práctica que nos puede ser útil en otras áreas de la vida para identificar lo que queremos y lo que no queremos.
Imaginar no es sólo pensar de manera creativa. Es no poner límites a nuestra mente y dejar paso a la imaginación. Es el momento de pensar sin barreras. Nuestras propias limitaciones se van desvaneciendo para llegar a la fase de la creación, de lo nuevo.
Crear no es sólo producir. Es la última fase del proceso donde le damos forma a pensamientos y reflexiones. Ese punto final en que vemos un resultado, una acción concreta. Sea la que sea, pintar un cuadro, escribir una poesía, componer una melodía, inventar una historia, escribir un guion o simplemente tomar una decisión.
Disfruta de tu paseo, es solo tuyo.
Gabriela Cigliuti Fioroni
Referencias
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